Una relación romántica introvertido-extrovertido suena como la receta perfecta para el desastre. Sin embargo, ésto no es del todo cierto ya que una pareja de éste tipo puede funcionar al igual que cualquier otra.
Cuando hablamos de una pareja introvertido-extrovertido estamos hablando de personas con diferencias en su forma de ver y afrontar la vida. La persona extrovertida ama estar rodeada de personas, mientras que la introvertida buscará tiempo alejada de todos. Al introvertido le tomará mas tiempo procesar las cosas que al extrovertido. Las conversaciones casuales del extrovertido querrán ser llevadas a terrenos más profundos por el introvertido. Y aún con todas éstas diferencias te prometo que ésto si puede funcionar.
Hay que ser honestos y comentar que es claro que existirán tiempos difíciles y de discusión. Pero te tenemos una noticia, no sólo las relaciones introvertido-extrovertido pasan por estos momentos difíciles. Todas las personas somos diferentes independientemente de nuestra personalidad, y en una relación la comunicación y entendimiento de ambas partes será clave.
A continuación te presento algunas ventajas de las relaciones introvertido-extrovertido
Ventajas de una relación introvertido-extrovertido
Es más fácil para el introvertido conocer y conectar con algunas personas gracias a su pareja extrovertida
Los introvertidos suelen pasar mucho tiempo en soledad, simplemente porque lo disfrutan y les encanta hacerlo. Un día lluvioso o nevado, encerrados en casa, viendo Netflix en pijamas, suena a un excelente plan (no es obligatorio que esté lloviendo o nevando). Un buen libro y terminarlo en un sólo fin de semana también es excelente.
Sin embargo, existen actividades que son divertidas en grupo y que de vez en cuando también vale la pena explorar. Los juegos de mesa, cartas, domino o incluso jugar Mario Kart son ejemplos de actividades que pueden ser más divertidas en grupo, aceptémoslo.
Los círculos de amigos de los introvertidos generalmente son pequeños, y cuando quieren salir pero ese grupo no tiene disponibilidad, vuelven rápidamente a su cueva. Aquí es donde entra a salvarlos la pareja extrovertida. Los extrovertidos casi siempre están conectados con alguien, les gusta compartir, salir, pasear. Las reuniones con amigos o familiares son algunas de sus formas favoritas para pasar el tiempo.
El estrés del introvertido por tener que buscar nuevas amistadas o conexiones se diluye un poco porque la pareja extrovertida lo hace por ambos, el introvertido sólo asiste y disfruta. Aunque parezca que los introvertidos siempre quieren estar solos, no es verdad el 100% de las ocasiones. Para estas ocasiones donde también quieren salir y socializar es de gran ayuda contar con uno o varios grupos de personas disponibles gracias a su pareja extrovertida.
Amplían sus horizontes
Un sábado o domingo completamente en casa funciona de maravilla para alguien introvertido. Por otro lado, un fin de semana fuera de casa es lo preferido por una persona extrovertida. Sé que puede parecer que hacer uno u otro plan sería una pesadilla para el otro, pero podríamos estar equivocados.
Alguien extrovertido puede animar a alguien introvertido a conocer lugares que le gusten y que no sabía de su existencia. Parques, lagos, restaurantes y demás lugares que aunque no sean la primera opción de un introvertido si puede llegar a disfrutar. El extrovertido por otro lado puede aventurarse en conocer algún libro o serie que disfrute, y que no hubiera descubierto si saliera fuera todos los fines de semana.
El objetivo es atrevernos a realizar actividades y experiencias diferentes a las que hacemos normalmente. De otra forma como descubriremos nuevas cosas que nos puedan gustar, si siempre hacemos lo mismo. Mientras que el extrovertido ayuda al introvertido a no convertirse en un ermitaño, el introvertido ayuda al extrovertido a reconectarse consigo mismo y ser más introspectivo.
Las fortalezas de ambos se complementan
Una relación introvertido-extrovertido sabemos que puede significar diferencias, pero ésto también significa distintas fortalezas. La unión de estas fuerzas a través de la comunicación y el entendimiento puede ser una de las principales ventajas para estar en una relación de éste tipo.
Como se veía en el punto anterior, alguien introvertido puede aprender de su pareja extrovertida las herramientas sociales que le podrían ayudar en diferentes ámbitos de su vida. Por otro lado el extrovertido puede aprender a ser menos impulsivo y pensar un poco más lo que comunica, que sin lugar a dudas le ayudará también en su vida cotidiana.
Los introvertidos son muy perceptivos, escuchan atentamente y pueden distinguir o ver ciertas cosas que los demás no. Éstos puntos de vista valiosos pueden ser aprovechados por alguien extrovertido, que no identifica los mismos detalles con la facilidad que lo haría su pareja introvertida.
El pensamiento antes de actuar es una ventaja de los introvertidos, pero también los puede llevar a caer en la «parálisis por análisis»; es decir, no actuar por estar creando una infinidad de escenarios en su cabeza. La pareja extrovertida puede ayudar a «empujar» o convencer de actuar a su pareja introvertida y sacarla de su ciclo de parálisis.
Tal como las situaciones anteriores existen muchas más ejemplos que nos demuestran que las fortalezas se pueden complementar. No perdamos esa oportunidad.
Conclusión sobre la pareja introvertido-extrovertido
Podemos notar que las diferentes características de los miembros en una pareja introvertido-extrovertido no tienen porque distanciar a la pareja. Al contrario, las diferencias se pueden usar para sumar y unir más a la pareja.
Como en cualquier pareja, la comunicación asertiva, aceptación y obviamente el amor que se tengan hacen funcionar
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